La impresión flexográfica es un sistema de impresión ampliamente implementado en todo el mundo para imprimir etiquetas personalizadas a gran velocidad. Es un método tradicional de impresión que se ha perfeccionado con los años. Gracias a un conjunto de evoluciones en sus técnicas de preimpresión e impresión. La flexografía està presente en diversos mercados y es, hoy día, el sistema de impresión más utilizado en Packaging, con materiales tan diversos como envases flexibles, cartón corrugado, papel, cartón compacto y cartoncillo, sleeves, films, etc. Por sus ventajas y características ha tenido un crecimiento importante en la producción de etiquetas.
Éste no pretende ser un artículo excesivamente técnico, existen libros especializados para tal fin, pero intentará resolver dudas básicas de un sistema de impresión del que se ha dicho que el secreto de su buena realización está en el control de las variables, por la gran cantidad de procesos y materiales que intervienen en su elaboración.
Qué es la impresión flexográfica
La flexografía es un sistema de impresión directo (la plancha transfiere directamente la tinta al soporte) y principalmente rotativo (con rodillos y material en bobinas de distintos tamaños) en el cual se emplean planchas flexibles con altos relieves y una estructura formada principalmente por rodillos. La palabra flexografía proviene de la palabra latina “Flexus”, que significa doblado.
Está técnica es una forma rápida y económica para aplicar diseños simples. Como también, áreas de color a una amplia variedad de materiales como cartón ondulado, plásticos, etiquetas autoadhesivas, sobres, etc. La principal ventaja de la impresión flexográfica es la capacidad de imprimir en distintos sustratos.
En esta técnica se utilizan unas planchas flexibles. También conocidas como cliché, que para la alta calidad están hechas de fotopolímero, un material muy duradero que permite acabados con mayor detalle. También se utilizan planchas de goma o caucho para realizar, por ejemplo, los clásicos tampones. Las tintas base agua utilizadas actualmente en flexografía se secan rápidamente por evaporación y son seguras para su uso para todo tipo de recubrimientos que entran en contacto directo con el producto. Para otro tipo de tintas como las UV (ultravioletas) sus polimerizaciones con lámparas también son aceptadas para muchos productos, pero en los productos alimentarios se requieren tintas de baja migración. Actualmente, para ahorrar consumo energético y evitar le emisión de ozono, se están implementando las tintas UV LED.
Historia de la flexografía
La historia de la flexografía se remonta en 1890 cuando se patentó en Liverpool la primera prensa y se empleaba tinta a base de agua, lo que hacía que se difuminara fácilmente. A principios del siglo XIX se desarrollaron otras pensas con planchas de goma y tinta a base de aceite de anilina. De modo que este proceso de impresión se conoce como “impresión de anilina” (un término empleado hasta la década de 1950). En esta época se desarrolló el rodillo anilox, un rodillo de tinta que estaba grabado y era idóneo para transferir la tinta a una placa de impresión de anilina. Actualmente, ese rodillo sigue usándose en las prensas flexográficas.
Con los años se dieron cuenta que la tinta de anilina era inadecuada para los envases de alimentos y fue declarada tóxica por la Administración de Medicamentos y Alimentos (Food and Drug Administration). Entonces, se empezaron a buscar alternativas hasta que en 1949 la Administración de Alimentos y Medicamentos aprobó nuevas tintas que no eran perjudiciales para la salud. Sin embargo, la población seguía preocupada por su salud, a pesar de no usar anilina. En 1951 se decidió hacer un concurso para cambiar el nombre de este proceso y finalmente en 1952, por el bien de la industria, se cambió el nombre por impresión flexográfica.
Desde entonces, la industria de la impresión flexográfica ha sufrido muchas innovaciones. A finales del siglo XX, la flexografía se empezó a usar en los periódicos gracias a su simplicidad y facilidad. Actualmente, más de un 60% de la industria del embalaje utiliza la impresión flexográfica.
Proceso de impresión flexográfico
Primera fase: preimpresión
La producción de la impresión flexográfica empieza con una idea o un diseño, generalmente de packaging (cajas, etiqueta, envases, botellas, etc…). Este proceso empieza con la creación del diseño digitalmente y termina con la preparación de las planchas, que se pueden hacer internamente o encargarse a un grabador externo. Finalmente, se procesa una plancha por cada color base, las cuales, después en el proceso de impresión, se superponen para conseguir reproducir fielmente el diseño.
Cuando las planchas están preparadas se deben incorporar en un cilindro de impresión que se cubre con una cinta de montaje. La plancha se coloca sobre ella. La colocación de las planchas es muy importante porque una mala colocación podrá dar unos resultados inesperados y se deberá empezar de nuevo el proceso.
Una vez listo, es el momento de introducir los colores que en el caso de cuatricromía son CMYK (Cyan Magenta Yellow Black), pero también permite incorporar colores directos que se superponen para reproducir las necesidades del diseño. Para evitar una segunda pasada, el diseño deberá tener un máximo de colores, barnices, etc. igual o inferior al número de cuerpos de impresión de la máquina impresora.
Segunda fase: impresión
Para ello, necesitamos una máquina flexográfica adecuada al tipo de producto a imprimir. No es lo mismo una máquina de etiquetas (generalmente en línea, de bobina a bobina y en banda estrecha), que una máquina para cartón ondulado (generalmente de gran formato y de bobina a hoja) o de material flexible (generalmente de tambor central y banda ancha), como ejemplos. Una vez tenemos las planchas y toda la máquina preparada, el segundo proceso a seguir surge cuando la plancha moldeada se coloca sobre el cilindro o rodillo porta plancha, que se introduce en el interior de la máquina impresora. En el interior entra en contacto con el rodillo anilox, que puede ser de cerámica o acero. En el rodillo anilox tenemos unas pequeñas cavidades (celdillas) donde se aloja la tinta que, al girar, entra en contacto directo con las zonas que están con relieve en la plancha impresora. Tras ser entintada sigue girando, hasta que finalmente entra en contacto con el sustrato, generando la impresión por la transferencia de tinta al soporte final.
Aunque la flexografía, como cualquier tipo de impresión, tiene sus limitaciones, hoy en día está compitiendo con otros sistemas de impresión por diferentes motivos. También, compite con el huecograbado por qué las máquinas cada vez son más rápidas, la calidad mejor y es económicamente más viable para tiradas cortas, que es la tendencia del mercado. Compite con la impresión digital por los costes, excepto para tiradas muy pequeñas. Asimismo, compite con el offset para tiradas largas en banda estrecha y por qué la calidad, aunque no para las más altas exigencias, empieza a ser excelente. Además, la flexografía tiene la ventaja que puede aplicar grandes masas de tinta con un efecto muy valorado, y es un cuerpo imprescindible para máquinas combinadas o de acabados, para aplicar barnices, blancos, colas, etc.
Técnicamente, podemos aceptar que presenta pequeñas desventajas como el efecto squash, que es un salpicado de tinta alrededor del punto impreso que perjudica la entonación y el ajuste de color, el hecho que con el tiempo las planchas de la impresora se acaban deformando; que el sistema de impresión en cuatricromías tiene limitaciones; que provoca el jaspeado (zonas que deberían estar impresas no lo están debido a un ensuciamiento en el cliché) aunque se puede evitar manteniendo limpia la plancha, o que, debido al tipo de planchas empleadas y el sistema de impresión, la ganancia de punto es mayor, con lo cual las lineaturas y los tamaños mínimos de las tipografías o líneas son menos precisos que en otros tipos de impresión. No obstante, la mejora del registro ha mejorado mucho, a pesar que se necesita hacer trapping en los trabajos, y la flexografia tiene grandes ventajas.
Características de la impresión flexografica
Versatilidad
Este sistema permite el uso de varios tipos de tinta. Por ejemplo la tinta en base de agua, en base de solvente o tinta curable con UV. Además, se puede utilizar cualquier material flexible, ya sea poroso o no.
Rapidez
Las máquinas de impresión flexográfica pueden alcanzar una gran velocidad por minuto. Esto permite hacer largas tiradas. Incluso, hacer tiradas cortas a un precio económico.
Automatización
una máquina flexográfica es muy fácil de programar.
Poco mantenimiento
la impresión de flexografía no requiere mucho mantenimiento. Esto hace que el precio de mantenimiento se reduzca.
Bajo costo
Los materiales que se emplean en este tipo de maquinaria suelen ser muy bajos en comparación a otro tipo de impresión. A pesar de que la plancha tiene un coste más elevado, es una opción muy rentable y proporciona un retorno rápido de la inversión.
Respetuoso con el medio ambiente
Las máquinas permiten usar tintas a base de agua, recicladas. Incluso las planchas son lavables con agua, esto permite que este tipo de impresión sea más ecológica que las demás.
Paleta de colores
La flexografía básica utiliza 4 colores (CMYK): cian, magenta, amarillo y negro. Pero, se pueden incorporar tantos colores directos como acepte cada configuración de máquina para ampliar la gama. De esta forma, podremos imprimir todo aquello que deseamos.
Máquinas de impresión con sistema flexográfico
Impresora de etiquetas Nilpeter FA-Line
La FA-Line es la prensa flexográfica más versátil del mercado. Diseñada para satisfacer las necesidades cada vez mayores del sector y construida con una interfaz de usuario intuitiva y con controles de impresión totalmente móviles. Este equipo permite mejorar el rendimiento. Con la posibilidad de añadir unidades de valor agregado, paquetes de aplicaciones y automatización en función de las necesidades de aplicación y el presupuesto.
Sus especificaciones técnicas:
Impresora de etiquetas Nilpeter FB-Line
La línea FB da respuesta a la cada vez mayor necesidad de automatización de procesos y mayor facilidad de uso. Esta linea se presenta con una serie de características adicionales, como el Sistema de posicionamiento automático de placas (APPS), la funcionalidad de pie-registro y preinscripción. Esta línea está diseñada para imprimir etiquetas de valor agregado de la manera más eficiente a altas velocidades. Este equipo está disponible en ancho de 13’’ y ancho de 16’’. Una prensa flexográfica diseñada para ofrecer la máxima flexibilidad a un precio asequible. Sus características son:
Eif 450 - Montadora de clichés
EiF 450 Video Plate Mounting Machine, la solución más fácil y precisa para el montaje de polímeros El diseño ergonómico e intuitivo permite adaptarse a la mayoría de rodillos de impresión. El montaje de los clichés es mucho más rápido que en los montadores tradicionales.
Asociaciones flexogáficas
Esagraf somos miembros activos de las principales asociaciones flexográficas: ATEF (la Asociación Técnica Española de Flexografía) y de la FTA Europe (Flexo Technical Asociation) participando de los principales eventos.